María del Carmen Verdú nació en Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires. Estudió derecho en la Universidad de Buenos Aires y se recibió de abogada en 1983. Desde 1977 trabajó como maestra de inglés y francés. En 1984 comenzó el ejercicio independiente de la abogacía y se especializó en derecho civil (daños y perjuicios) y penal. A poco de egresada de la universidad, formó, con un pequeño grupo de compañeros, la “Asociación Amuayu por los derechos humanos” (Los que van, en mapuche). La cotidiana represión policial, encarnada en los fusilamientos de gatillo fácil; la aplicación sistemática de torturas y la muerte de personas en cárceles y comisarías y las detenciones arbitrarias pronto ocuparon el primer lugar en la atención de la minúscula organización, que comenzó a vincularse con víctimas y familiares de víctimas de ese tipo de hechos, brindando el patrocinio jurídico y promoviendo su organización para encarar colectivamente la denuncia antirrepresiva. En mayo de 1992, fracasados los intentos por incorporar a la agenda de los organismos de derechos humanos tradicionales la represión en democracia, Verdú, con algunos militantes de aquel grupo inicial, y otros, acercados a partir de la visibilidad del caso Bulacio, constituyó la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI) [Fuente Herramienta].
Verdú dialoga con Puente Uno sobre la la fuga del penal de Ezeiza, como se encuentra el actual estado de la represión en la sociedad y en las cárceles, perpetrada por las fuerzas de seguridad.
María del Carmen Verdú, abogada (CORREPI).
María del Carmen Verdú, abogada (CORREPI): "...nosotros sostenemos que la necesidad que tiene cualquier gobierno de administrar una sociedad dividida en clases, de reprimir, se va a manifestar de diferentes maneras, en diferentes circunstancias, en los diferentes lugares y en relación a las distintas alternativas de grupos de personas que haya que reprimir...".
María del Carmen Verdú, abogada (CORREPI): Distintas alternativas de represión que usa la policia en la sociedad argentina.
María de carmen Verdú, abogada (CORREPI): "...el gobierno nacional acosado por las denuncias de tortura y de muertes en las cárceles federales, anunció con bombos y platillos que iba a hacer un cambio cultural en el servicio penitenciario...".