La Crisis Civilizatoria



Si echamos una mirada a nuestro planeta, vemos lo poco efectivas que son las políticas trazadas para conseguir un medio ambiente sano y sostenible. 
Bah... Digo.... ¿Existen esas políticas en realidad?
Está bueno saber que cada vez hay más gente comprometida con la ecología.
Pero…¿alcanza con eso?
La marcha del capitalismo mundial implica un proceso de extracción cada vez más grande y veloz de muy diversos recursos y bienes comunes. Y para mantener ese crecimiento permanente necesita del consumismo irracional que nos fomentan desde los medios.

Pero ese crecimiento se produce en el marco de un planeta finito y nos lleva a situaciones límite en su propia lógica de funcionamiento:
- el cambio climático;
- el inminente colapso energético;
- la pérdida constante e irrecuperable de suelo fértil, que hará cada vez más difícil producir alimentos para todos;
- el agua potable cada vez más contaminada en cantidades gigantescas;
- la destrucción de humedales y de los glaciares (por el calentamiento global y la megaminería, entre otros procesos).

Hace ya varios años, Fidel Castro advertía sobre la crisis civilizatoria que estamos viviendo.
Evo Morales también viene denunciando el modo de producción capitalista y reclamando en sus discursos por acciones concretas de respeto a la naturaleza. 

Ahora es el Papa Francisco quien lanza un llamado de alerta ante el cambio climático actual, que ya vemos, tiene consecuencias desastrosas.
Critica con fuerza a lo que denomina "poderes económicos".
Llama a una "conversión ecológica" y a un "cambio radical en el comportamiento de la humanidad".
Pide por un cambio del sistema mundial, que dice, es "insostenible desde diversos puntos de vista".
Y siempre con un estilo de vida más sobrio, simple, solidario, menos acelerado y consumista.

Esta crisis civilizatoria, es la suma de crisis coincidentes (alimentaria, sanitaria, energética, laboral, económica, cultural, ambiental, humanitaria, etc).

Entonces...
¿Qué cambios son los más necesarios?
¿Qué cambios son los más urgentes?
¿Cómo hacemos para modificar el modelo productivo?
¿Cómo hacemos para cambiar las pautas de consumo?
¿Cuáles son las alternativas económicas, políticas, sociales y culturales, para conseguir un cambio profundo que nos permita avanzar hacia destinos más humanos y sustentables?

Quizás un intento de respuesta esté en las propias palabras de Fidel:
“Si se quiere salvar a la humanidad de esa autodestrucción, hay que distribuir mejor las riquezas y tecnologías disponibles en el planeta. Menos lujo y menos despilfarro en unos pocos países […]. Mañana será demasiado tarde para hacer lo que debimos haber hecho hace mucho tiempo”.